top of page

Discalculia... ¿Problemas con los números?


La discalculia, al igual que el resto de los trastornos específicos del aprendizaje, es un problema que puede afectar notoriamente al desarrollo. En este caso, los niños tienen problemas con los números. Sin embargo, supone afectaciones que no solo se relacionan con dificultades académicas sino también, con el ámbito social, comportamental y emocional. Por lo tanto, es de gran relevancia conocer, entender e identificar este trastorno lo más rápido posible.


¿Qué es la discalculia?

La discalculia es un trastorno del aprendizaje que afecta la adquisición del conocimiento numérico. Es decir, impacta en los aspectos más básicos del procesamiento numérico. Esto se ve reflejado en la dificultad para entender el sentido de los números, escribir y leerlos.


Como resultado, hay problemas para realizar operaciones simples y complejas. En resumen, la persona tiene problemas con los números. Uno de los rasgos más característicos presentes es el uso de los dedos para realizar operaciones sencillas.


Asimismo, muestran inconvenientes en el momento de aprender y automatizar las tablas de multiplicar. En consecuencia, hay dificultades en la realización de operaciones matemáticas. Por lo tanto, la discalculia interfiere significativamente en el rendimiento académico y en las actividades que requieren de aritmética.


Una manera de ejemplificar la situación es la compra de la merienda. En este caso, la persona necesita manejar dinero y, por ende, utilizar las matemáticas. Asimismo, se ha encontrado que, a largo plazo, podría haber dificultades para el ingreso en el mundo laboral. Incluso, puede crear problemas en la realización personal y/o social.


Dentro de las causas de la discalculia, se ha identificado la presencia de factores genéticos, epigenéticos y ambientales. Todos estos aspectos pueden afectar la capacidad del cerebro para percibir y procesar la información numérica de una manera precisa y eficiente.


Bases cerebrales de la discalculia

Se han encontrado algunas dificultades en el funcionamiento cerebral de las personas que sufren de discalculia o problemas con los números. Entre las principales áreas cerebrales implicadas en este trastorno están:


  • Surco intraparietal. Vinculado con la noción de cantidad.

  • Regiones perisilvianas, ganglios basales y núcleos talámicos izquierdos. Encargadas del procesamiento de los números en formato verbal.

  • Regiones inferiores occitotemporales. Relacionadas con el procesamiento visual de números, equivalencia numérica y tareas de cálculo con varios dígitos.

  • Áreas frontales y parietales. Importantes en los procesos ejecutivos y atencionales.

  • Giro fusiforme. Lugar en el que se hace el reconocimiento visual de los números.

  • Córtex prefrontal inferior. Ligado a la codificación oral de los números.


¿Cómo se puede intervenir?

Es necesario realizar una intervención interdisciplinar en la que se consideren los aspectos físicos, cognitivos y pedagógicos del niño. El objetivo se debe centrar en la mejora de su funcionamiento en las actividades realizadas en el colegio y casa. Para ello, es importante procurar que sean individualizados y adaptados a sus necesidades.


El primer aspecto a trabajar es la psicomotricidad. En esta, se trabajan especialmente aspectos propioceptivos y motores.


Entre las actividades que se pueden utilizar encontramos el conocimiento del esquema corporal, coordinación viso-motora y orientación espacial.


En segundo lugar, se debe intervenir en los aspectos cognitivos. En este caso, se ha de enfocar en la simbolización. Es decir, el paso de la información concreta a la abstracta. Se trabaja principalmente:


  • Aumento de vocabulario matemático.

  • Procesos atencionales.

  • Sustitución de la representación gráfica de elementos a símbolos determinados (cambiar de los elementos dibujados a los números).

En tercer lugar, se trabajan los aspectos psicopedagógicos. Este trabajo se centra en ejercicios específicos de cálculo. Sobre todo, en la noción de cantidad y cálculo escrito o mental.

Asimismo, se pueden implementar herramientas tecnológicas para realizar actividades de cálculo y atención. Esto resulta útil, dinámico y estimulante para el niño.

Por último, es necesario trabajar en los aspectos emocionales y comportamentales. Se ha encontrado que puede existir una relación entre la discalculia con otras dificultades.

Por ejemplo, problemas de autoestima, frustración, ansiedad y problemas en el comportamiento. Estas dificultades producen que el niño rechace el aprendizaje matemático. En casos extremos, pudiendo llegar a no querer asistir al colegio.



Referencias bibliográficas

• García, N., Santana, A., Soria, B., Herrera, V. y Vila, M. (2016). Neuropsicología y bases neurales de la discalculia. Morfovirtual. http://morfovirtual2016.sld.cu/index.php/Morfovirtual/2016/paper/viewPaper/110

• García-Orza, J. (julio 2012). Dislexia y discalculia. ¿Extraños compañeros de viaje? [Presentación de conferencia]. XXVIII Congreso de AELFA. Madrid, España.

• Geargy, D. (2017). Trastornos del Aprendizaje | La Discalculia en Edad Temprana. Enciclopedia sobre el Desarrollo de la Primera Infancia. http://www.enciclopedia-infantes.com/trastornos-del-aprendizaje/segun-los-expertos/la-discalculia-en-edad-temprana

Comments


bottom of page